domingo, 16 de mayo de 2010

EL PRESIDENTE PERPLEJO Y LOS BUITRES DEMAGÓGICOS.


Me da que el presidente Zapatero está perplejo, yo también. Y no me sirven, ni le sirven a él, las explicaciones de los economistas; que ese gremio ya no es fiable después de no haber sido capaz de prever la crisis ni de dar una fórmula que la evitara. Así que se me da una higa lo que digan los economistas sobre lo que hay que hacer. De repente, Grecia se escora hacia el corralito, nadie lo había previsto (?) y hay que adoptar medidas drásticas y draconianas de austeridad si queremos salvar el Euro y nuestro bienestar; y todos debemos apechugar con los sacrificios, bueno, todos menos el tiparraco ese, directivo de un banco, que se jubila con 8 millones de €, los especuladores y demás indeseables capitalistas, precisamente los que, asesorados por los mejores economistas, han provocado esta crisis. Y es que si se hubiera descubierto ya la forma de evitar las crisis, el progreso social de los trabajadores seguiría creciendo indefinidamente y al final ya no habría pobres y ricos. Así que me parece a mi que los ricos, de vez en cuando, arman una crisis, obligan a los trabajadores a renunciar a sus derechos para salvar lo salvable, y vuelta a empezar. La Revolución Permanente, vamos. Y es que no se puede ser socialista en un país capitalista, de la misma manera que no se podía ser antiesclavista en el viejo Imperio Romano. No nos engañemos, el sistema económico que triunfa no es el más justo, sino el más eficiente. Así que no hay alternativa. Por eso, Zapatero, al que presumo sinceramente socialista, se ha resistido a adoptar medidas de recorte social mientras ha podido; pero al final han venido los socios de la Comunidad Europea y el Emperador Obama, empeñados en hacer lo que sea para salvar el sistema, y lo han puesto, al pobrecillo, de rodillas y con los brazos en cruz.
La cara que ponía Zapatero mientras anunciaba los recortes era enternecedora. Más le valiera habernos dicho la cruda verdad, algo así como: "Españoles: Me he resistido a adoptar estas medidas de retroceso social mientras he podido, pero estamos inmersos en un sistema injusto, monstruoso, llamado capitalismo que, por desgracia, hoy por hoy, no tiene alternativa. Así que me veo obligado a recortaros derechos y conquistas y exigiros sacrificios que salvarán el sistema más asqueroso parido por el homo sapiens, mal que me pese..." Y así, todos saldremos perdiendo con tal de no más perder. El que manda, manda (y no es Zapatero, ni ningún Jefe de Gobierno, Estado o similar). Y ahora se oye en las alturas el aletear de los buitres del Partido Popular, diplomados y doctorados cum laude en Demagogia Electoral Aplicada. Ellos, que se han pasado meses suspirando por las medidas de austeridad, ahora, cuando las toma el Jefe del Gobierno, claman contra ellas y se rasgan las vestiduras en nombre de los funcionarios y los pensionistas. Como si les importara un carajo la suerte que puedan correr unos y otros. Todo por el voto. Y los tontos pobres, que no hay nada más tonto que un pobre de derechas, votarán al PP en las próximas elecciones. No saben, o no quieren saber, que si hoy estuviera gobernando Rajoy, esas medidas, y otras peores que afectarían a la sanidad, educación, dependencia, etc. se habrían tomado hace meses, y los funcionarios llevarían meses cobrando menos, y los pensionistas ya tendrían la pensión congelada desde el año pasado.

Desde luego, deberíamos esperar ahora que el Gobierno socialista adopte medidas de austeridad que jodan también a los poderosos, como retirar la asignación a la Iglesia Católica, limitar las pensiones de los directivos de las grandes empresas, subirle los impuestos a los ricos, acabar con los chollos impositivos de esas sociedades que solo cotizan el 1%, limitar los gastos militares, y alguna más. Pero para eso hay que ser muy temerario y apechugar con las consecuencias, porque esa gente es capaz de apretar un botón y que la economía se vaya definitivamente al carajo en Europa, que ellos ya tienen la pasta en las islas Caimán (qué nombre más apropiado).

Lo malo del PSOE en general y de Zapatero en particular es su poca capacidad para explicarse, para responder a los graznidos de los buitres demagógicos de la derecha sin vergüenza, de ser didácticos. Se encuentran inermes frente a las mentiras de los carroñeros, de los mismos carroñeros que se comen las carnes de Garzón (que no solo el gremio de los economistas anda desprestigiado; no veas los jueces), mientras se desentienden del señorito valenciano de los trajes y boicotean el Estatut de Catalunya. Los mismos buitres que saben que la economía capitalista no tiene alternativa alguna que no conduzca al desastre del estancamiento económico y el totalitarismo. El capitalismo lo vende todo, hasta la libertad, y si no tragas te mueres de hambre, libre, eso sí. Así que, hala, a perder poder adquisitivo, a ver menguar los derechos sociales, a desinflar un poquito esta sociedad del bienestar, a mirar para otro lado cuando veamos a los del Tercer Mundo morirse de miseria, a bajar la cabeza ante las medidas y a joderse. Y no corráis (ni protestéis, ni hagáis huelgas, ni nada) que es peor. Después de la caida del Muro de Berlín ya sabemos que la revolución no sirve para nada, o peor, que es más malo el remedio que la enfermedad. Al final, el que se beneficia siempre es el más hijo de puta. Nos tienen cogidos por los huevos.

La culpa la tiene Zapatero, el iluso, el perplejo, por creer que se puede ser socialista en un mundo capitalista.

Y perdonen ustedes mi pesimismo, pero es que me sale de los adentros.

Snif...

Miguel Ángel Pérez Oca.

4 comentarios:

Joaquín Botella dijo...

“NEGRAS TORMENTAS ANIDAN LOS AIRES”


Estoy contigo, amigo Miguel Ángel, sobre todo en eso de que los desalmados capitalistas tienen cogidos por lo huevos a la desarmada sociedad. Pero yo creo que lo que habría que hacer es, sencillamente, cortarles las manos, para que suelten.
Sin embargo, el guiñol político yo lo veo de otra manera, pues aunque también pienso, como tú, que el gran capital es el titiritero de esos títeres que son los partidos, los sindicatos y esta sociedad tiritante de frío, hambre, egoísmo e ignorancia, lo que creo es que tanto el PP como PSOE en lo que están es en cosechar votos y los sindicatos en tomar el sol los lunes, pero, eso sí, cobrando las dietas y sus desplazamientos orbitales. Y que a la sociedad le faltan cojones para tirarse a la calle, guillotina en mano.
Así que, visto como está el patio, yo he optado también por soluciones mezquinas y egoístas: confío en que mi ayuntamiento sea un de ésos que, como hicieron cuando congelaron las retribuciones básicas de los funcionarios (que las fija el Estado), compensaron la pérdida salarial con las complementarias (que son competencia municipal), pues ya se sabe que hecha la ley, hecha la trampa. Y sin el menor cargo de conciencia, porque, vamos, digo yo, que, si quieren ahorrar, mucho más conseguirían gastando menos en flores para los santos patronales, bailes, fútbol, toros… que no recortándonos un cinco por ciento de las habichuelas a los funcionarios que sí que nos las ganamos, que también los habemos, aunque no abunden, como pasa con los políticos honrados.
Y que no cuenten conmigo los sindicatos para hacerles el caldo gordo con la huelga, pues yo prefiero ir a la consulta del médico, donde, ya que la Seguridad no pone revisteros, me llevo una novela y recado de escribir, y así la espera se me pasa volando y, además, no me descuentan de la nómina.
Otra actitud, la más común, es la francesa: “Laissez faire, laissez passer, le monde va de lui même”… y, si acaso, escríbelo, digo yo, que así, al menos, te desahogas.

Joaquín Botella

Joaquín Botella dijo...

Querido Joaco:
Cuando leí tu artículo y sobre todo cuando leo los diarios (de aquí y de allá) me recuerda a la Argentina del 2001 ¿Te acordás lo de las cacerolas? A los empleados públicos los simpáticos compañeros Cavallo y De Rua rúa nos bajaron el 13% de los salarios, después inventaron lo del "corralito" (toda la gente que tenía sus ahorros en los bancos en dólares se los incautaron. Lo devolvieron años después, juicio mediante, ni siquiera en pesos sino en bonos del estado) Los argentinos estamos tan acostumbrados a eso que pasa ahora en Europa que ya no nos sorprende nada y es verdad que las grandes corporaciones y los que siempre tuvieron dinero con las crisis hacen sus grandes negocios.
Fijate, el año pasado aquí 1 euro estaba casi a 6 pesos argentinos. Hoy 1 euro vale 4,50$, si tuviera plata corro a comprar euros baratos para visitar a mi hijo en enero y llegar con mucha eurozona en los bolsillos... eso lo estarán haciendo los mismos especuladores de siempre. No deben conformarse, salgan a la calle y hagan sonar las cacerolas. No creo que sea culpa de tu gobierno, sino de las condiciones del FMI y de los organismos con los que España ha contraído deudas, (léase también Grecia, Irlanda, Portugal)
Como bien decís vos: los depredadores tendrán agarrados de las bolas a los ratones) No sé si Zapatero se ha sincerado con el pueblo, es la única manera de que lo puedan apoyar y entre todos sacar el país adelante.
Fijate que lo que a ustedes les sucede me duele como si me sucediera a mí, tengo a Ramiro ciudadano español y amo a ese país porque acogió a mi hijo y se forjó un futuro, que en la Argentina del 2000 era imposible.
La historia es cíclica. Ya va a pasar... Te mando un abrazo incondicional desde el otro lado del mundo

TU AMIGA BEA

Miguel Ángel Pérez Oca dijo...

Hola, Bea, bienvenida al club de los optimistas. Te agradezco mucho tu opinión, que recibo por medio de Joaquín Botella. Ya ves que en este mundo capitalista y pseudodemocrático en todas partes cuecen habas. Ayer te tocaba a vosogtros y hoy a nosotros, pero los que ganan son los mismos.
Un abrazo fraternal.
Miguel Ángel Pérez Oca.

epoca dijo...

Querido Joaquin, nosotros somos las negras tormentas. Quiero decir que mientras alguien se considere disconforme, se rebele, grite, actue, comunique, combata, escupa, o se cisque en lo más sagrao, los buitres que intenten cogernos por los huevos, pueden econtrarse con iniciativas como la que dices, perder la garra. No me gustan las frases hechas pero algunas joden. Cuantas más paparruchas nos cuenten más alto debemos repetir que "nuestros sueños son sus pesadillas".

Eusebin