jueves, 31 de marzo de 2011

POR FIN MI LIBRO EN CARAVACA.


Por fin presento mi libro "la Cruz ausente" en Caravaca de la Cruz. Para mi va a ser la culminación de mi mejor novela, que tiene como fondo la misteriosa historia de la Cruz de Caravaca. Será el día 8 de abril de 2011, a las 20 horas, en la sala de la Sacristía de la antigua Iglesia de la Compañía de Jesús en esa población. Me presentan el libro mis amigos Gregorio Piñero y Alfonso Pozo, ambos caravaqueños y grandes conocedores de la famosa Cruz y su historia, así como el editor José Antonio López Vizcaino, gerente de la Editorial Club Universitario. Asistirá el Ilmo. Sr. Alcalde D. Domingo Aranda Muñoz.

No podía encontrar mejor marco ni mejor compañía.

"En la noche del 30 al 31 de marzo de 1939, en el puerto de Alicante, mientras la Segunda República se hundía a su alrededor, el comandante del Ejército Republicano Benavides Fuster le contaba a su hija Moneta la rara historia de una cruz rodeada de misterios y leyendas. Antes que comandante, Fuster había sido inspector de policía y había investigado la desaparición de la Cruz de Caravaca en una noche de Carnaval de 1934. Se había acusado del robo a los masones que ocupaban entonces el Ayuntamiento, al Arcipreste del pueblo, al capellán del Santuario, a un extranjero que viajaba en una moto de gran cilindrada... Nunca se supo quién fue el ladrón y hoy día el misterio pervive y la Cruz sigue ausente. Fuster sabía que iba a morir en cuanto fuera identificado por los falangistas que aguardaban a la entrada del puerto, donde miles de desesperados esperaban en vano los barcos del exilio. La investiagación del robo le había obsesionado durante años, sobre todo, después de la misteriosa muerte del encargado de la traducción de unos antiguos manuscritos del siglo XIII; y el resultado de sus pesquisas no podía desaparecer con él. Por eso relató a su hija la historia de un caballero templario anónimo que fue quien tomó posesión de una alcazaba musulmana en la frontera del Reino de Granada en nombre del príncipe Alfonso de Castilla, y dejó en ella la cruz cimera de su estandarte. En el envés del Lignum Crucis que guardaba en su interior estaba el secreto de su origen legendario y los motivos de su futura desaparición. El castillo se llamaba Ksar al Kravak y el nombre del caballero es desconocido. Moneta sería la depositaria de estos secretos hasta que hubiera de nuevo democracia en España y pudiera encontrar un escritor que los diera a conocer. Y ese escritor fuí yo."


Estáis todos invitados.

Miguel Ángel Pérez Oca.

1 comentario:

Begoña dijo...

Espero que te vaya estupendamente con este último libro, yo ya estoy esperando leerlo!!