Mis amigos de Alicante Vivo me envían este manifiesto, en cuya redacción yo he participado, faltaría más, para ser publicado en este blog y en el suyo y ser enviado a todos los medios y organizaciones interesadas.
No hay derecho a que una asociación que es una de las pocas voces libres e independientes de esta ciudad, esté sufriendo el bombardeo que está sufriendo a cuenta del otro bombardeo. Ya está bien de pensamientos dirigidos e intentos de manipulación de unos y otros. Quien eso hace o no tiene vergüenza o el fanatismo no le deja ver el bosque. Nada diré de los partidos hambrientos de votos que estuvieron tan calladitos para que no los salpicasen y ahora se echan como buitres a la refriega. Ni queréis el monumento ni os imparta Alicante, solo os interesa la pelea tabernaria en busca de votos, en busca de mantener el poder, o en busca de un prestigio que no os merecéis.
Os voy a proponer un texto que debería ser del agrado de todos.
Ahí va:
"EL PUEBLO DE ALICANTE HONRA LA MEMORIA DE LAS MÁS DE 300 VÍCTIMAS MORTALES DEL BOMBARDEO SUFRIDO POR ESTA CIUDAD EL 25 DE MAYO DE 1938, PERPETRADO POR AVIADORES ITALIANOS A LAS ÓRDENES DE LOS GENERALES SUBLEVADOS CONTRA LA II REPÚBLICA".
Ahora, ¿qué pegas le veis, unos y otros, a esta leyenda? Dice que las víctimas mortales lo fueron por un bombardeo, no por una epidemia de gripe; dice quiénes fueron los que bombardearon. Lo dice todo, aunque, claro no dice "fascistas" para que la alcaldesa se quede tranquila, no sea que se le marchen los votantes franquistas. ¿Qué pasa? ¿Tampoco se puede transigir en eso? ¿Tenemos que sacrificar el monumento a una sola palabra? ¿Nos jugamos la virilidad? ¿Nos pica que el texto no se os haya ocurrido ni a unos ni a otros, del mismo modo que no se le ocurrió a nadie, menos a Alicante Vivo, lo de cambiar el nombre a la plaza por "Plaza del 25 de mayo"? ¿Solo el maximalismo es digno? ¿Hasta dónde puede llegar la mezquindad en esta desgraciada ciudad?
No volveré a abrir la boca sobre este desgraciado asunto. Quedáos con vuestros fanatismos y vuestros maquiavelismos de vía estrecha, ambos dos. Dejáos contaminar por las ambiciones electoralistas de los partidos y las concepciones estrechas de la política, porque desde luego no sois Mahatma Gandhi. Y olvidadme. Dejadme con mis amigos, que a mi me gusta estar rodeado de gente honesta y racional.
Me avergüenzo de vosotros, ambos dos, y os doy las "gracias" en nombre de mi madre y de los pocos supervivientes de aquella masacre que van quedando.
Adiós, os dejo con el manifiesto de quienes queríais inmolar o manipular, aprovechándoos de su buena fe.
Que os divirtáis.
miguel Ángel Pérez Oca.
COMUNICADO DE LA ASOCIACIÓN CULTURAL “ALICANTE VIVO”.
Ante los comentarios recibidos y las infundadas afirmaciones aparecidas sobre nuestro comportamiento en lo relativo a la colocación del monumento a las más de 300 víctimas del bombardeo sufrido por esta ciudad el 25 de mayo de 1938, esta Sociedad Cultural quiere dejar muy claro lo siguiente:
1.- La Asociación Alicante Vivo, sumándose al manifiesto presentado en su día por el escritor Miguel Ángel Pérez Oca y teniendo noticia de que la colocación del citado monumento no avanzaba por una ausencia de diálogo entre la Comisión Cívica para la recuperación de la Memoria Histórica y el Ayuntamiento de Alicante, debido, al parecer, a un desacuerdo en el contenido del texto propuesto para la placa conmemorativa, se ha limitado, en la más pura concepción democrática de las formas que han de presidir cualquier negociación, a pedir el diálogo y el consenso sobre ese punto.
2.- En todo momento hemos defendido el proyecto de la arquitecta Elena Albajar, y hemos definido la cita “aviadores fascistas italianos” como una descripción “rigurosamente histórica”, aunque, ante la oposición de la Alcaldesa y el Concejal de Cultura a figurar en el monumento la palabra “fascista”, nos hemos atrevido a proponer que se consensuara dicho texto, entendiendo que nuestra lengua es lo suficientemente rica en sinónimos como para permitir otra definicición igualmente descriptiva y exacta desde el punto de vista histórico; extremo este que aceptaba D. Francisco Moreno, miembro destacado de la Comisión, en un reciete artículo de prensa.
3.- Nuestro blog, como un medio de opinión libre que es, respetuoso con el parecer de todos sus participantes, está abierto en sus espacios de expresión a todos los lectores que, haciendo uso de sus derechos democráticos, opinan sobre este o cualquier otro asunto, proponiendo, en este caso, ideas de posibles redacciones alternativas. Aportaban así su granito de arena al diálogo que suponíamos se establecería de buena fe entre la Comisión y el Ayuntamiento. Es falso de todo punto que estuviéramos entrometiéndonos en el trabajo de la creadora del monumento intentando cambiar su redacción, puesto que en todas nuestras intervenciones hemos abogado por ella en su texto original; si bien, pensamos de buena fe que, si esta se iba a modificar por consenso se podían aportar ideas. ¿Dónde está nuestro entrometimiento o qué intereses estábamos vulnerando?
4.- Sentimos mucho haber herido los sentimientos de nadie; aunque no entendemos la razón de que nos hayan dirigido los reproches, incluidos insultos, y las acusaciones de “haber hecho mucho daño a la Comisión Cívica” o de “habernos entrometido en el proyecto”, del mismo modo que no permitimos que se nos manipule, por parte de quien sea, atribuyéndonos la intención y la responsabilidad de imponer un texto de nuestro gusto. Si a cualquiera de las dos partes en conflicto le molesta que ejerzamos nuestros derechos de opinión, lo sentimos por sus componentes, porque eso demostraría que tienen muy pobre concepto de la Democracia en la que nos amparamos.
5.- Es muy triste y muy lamentable que la persona que interviene de buena fe en una pelea en busca de la armonía y el diálogo sea atacada y reciba todas las bofetadas. Por desgracia es un hecho que se repite incontables veces a través de la historia: siempre los bien intencionados son pisoteados o manipulados por los intransigentes, que no quieren ver interrumpidos o desautorizados sus odios, sus temores y sus dogmatismos. Qué le vamos a hacer. También nos duele la posición cómoda y cobarde de algunos partidos y colectivos que, en lugar de apoyarnos en nuestra demanda de diálogo, se han lavado las manos para evitar salpicaduras.
6.- No tenemos que demostrar a nadie nuestras profundas convicciones democráticas. En nuestra Asociación Cultural se admite a todo aquel que quiera trabajar o le interese participar en actividades o trabajos literarios o de investigación cuyo tema sea Alicante. En este caso concreto nuestro interés es homenajear a las víctimas civiles, no combatientes, de aquel triste bombardeo, sin importarnos para nada sus ideas ni sus trayectorias políticas, sino su condición de pacíficos residentes en Alicante y pueblos limítrofes; un bombardeo efectuado, sin duda, por aviadores fascistas italianos a las órdenes de los generales alzados en armas contra el gobierno legítimo de la II República. Creemos que existían muchas posibilidades de llegar a un acuerdo en el texto del citado monumento, si ambas partes hubieran obrado de buena fe. Lo que, por lo visto, no es el caso. Determinar a quién se debe atribuir la culpabilidad de que el monumento ya no pueda ser el de todos los alicantinos no es de nuestra incumbencia. Allá cada cual con su conciencia. Pero que sepa que su culpabilidad no se atenuará matando al mensajero, buscando una cabeza de turco o echándole la culpa a los que han obrado, y van a seguir obrando, con toda su buena voluntad, su fe en la Democracia y su amor a Alicante.
Dolidos, pero no desanimados,
ALICANTE VIVO.
Ante los comentarios recibidos y las infundadas afirmaciones aparecidas sobre nuestro comportamiento en lo relativo a la colocación del monumento a las más de 300 víctimas del bombardeo sufrido por esta ciudad el 25 de mayo de 1938, esta Sociedad Cultural quiere dejar muy claro lo siguiente:
1.- La Asociación Alicante Vivo, sumándose al manifiesto presentado en su día por el escritor Miguel Ángel Pérez Oca y teniendo noticia de que la colocación del citado monumento no avanzaba por una ausencia de diálogo entre la Comisión Cívica para la recuperación de la Memoria Histórica y el Ayuntamiento de Alicante, debido, al parecer, a un desacuerdo en el contenido del texto propuesto para la placa conmemorativa, se ha limitado, en la más pura concepción democrática de las formas que han de presidir cualquier negociación, a pedir el diálogo y el consenso sobre ese punto.
2.- En todo momento hemos defendido el proyecto de la arquitecta Elena Albajar, y hemos definido la cita “aviadores fascistas italianos” como una descripción “rigurosamente histórica”, aunque, ante la oposición de la Alcaldesa y el Concejal de Cultura a figurar en el monumento la palabra “fascista”, nos hemos atrevido a proponer que se consensuara dicho texto, entendiendo que nuestra lengua es lo suficientemente rica en sinónimos como para permitir otra definicición igualmente descriptiva y exacta desde el punto de vista histórico; extremo este que aceptaba D. Francisco Moreno, miembro destacado de la Comisión, en un reciete artículo de prensa.
3.- Nuestro blog, como un medio de opinión libre que es, respetuoso con el parecer de todos sus participantes, está abierto en sus espacios de expresión a todos los lectores que, haciendo uso de sus derechos democráticos, opinan sobre este o cualquier otro asunto, proponiendo, en este caso, ideas de posibles redacciones alternativas. Aportaban así su granito de arena al diálogo que suponíamos se establecería de buena fe entre la Comisión y el Ayuntamiento. Es falso de todo punto que estuviéramos entrometiéndonos en el trabajo de la creadora del monumento intentando cambiar su redacción, puesto que en todas nuestras intervenciones hemos abogado por ella en su texto original; si bien, pensamos de buena fe que, si esta se iba a modificar por consenso se podían aportar ideas. ¿Dónde está nuestro entrometimiento o qué intereses estábamos vulnerando?
4.- Sentimos mucho haber herido los sentimientos de nadie; aunque no entendemos la razón de que nos hayan dirigido los reproches, incluidos insultos, y las acusaciones de “haber hecho mucho daño a la Comisión Cívica” o de “habernos entrometido en el proyecto”, del mismo modo que no permitimos que se nos manipule, por parte de quien sea, atribuyéndonos la intención y la responsabilidad de imponer un texto de nuestro gusto. Si a cualquiera de las dos partes en conflicto le molesta que ejerzamos nuestros derechos de opinión, lo sentimos por sus componentes, porque eso demostraría que tienen muy pobre concepto de la Democracia en la que nos amparamos.
5.- Es muy triste y muy lamentable que la persona que interviene de buena fe en una pelea en busca de la armonía y el diálogo sea atacada y reciba todas las bofetadas. Por desgracia es un hecho que se repite incontables veces a través de la historia: siempre los bien intencionados son pisoteados o manipulados por los intransigentes, que no quieren ver interrumpidos o desautorizados sus odios, sus temores y sus dogmatismos. Qué le vamos a hacer. También nos duele la posición cómoda y cobarde de algunos partidos y colectivos que, en lugar de apoyarnos en nuestra demanda de diálogo, se han lavado las manos para evitar salpicaduras.
6.- No tenemos que demostrar a nadie nuestras profundas convicciones democráticas. En nuestra Asociación Cultural se admite a todo aquel que quiera trabajar o le interese participar en actividades o trabajos literarios o de investigación cuyo tema sea Alicante. En este caso concreto nuestro interés es homenajear a las víctimas civiles, no combatientes, de aquel triste bombardeo, sin importarnos para nada sus ideas ni sus trayectorias políticas, sino su condición de pacíficos residentes en Alicante y pueblos limítrofes; un bombardeo efectuado, sin duda, por aviadores fascistas italianos a las órdenes de los generales alzados en armas contra el gobierno legítimo de la II República. Creemos que existían muchas posibilidades de llegar a un acuerdo en el texto del citado monumento, si ambas partes hubieran obrado de buena fe. Lo que, por lo visto, no es el caso. Determinar a quién se debe atribuir la culpabilidad de que el monumento ya no pueda ser el de todos los alicantinos no es de nuestra incumbencia. Allá cada cual con su conciencia. Pero que sepa que su culpabilidad no se atenuará matando al mensajero, buscando una cabeza de turco o echándole la culpa a los que han obrado, y van a seguir obrando, con toda su buena voluntad, su fe en la Democracia y su amor a Alicante.
Dolidos, pero no desanimados,
ALICANTE VIVO.
1 comentario:
Como ye he dicho en otro comentario, cada día estoy mas orgulloso de mi hermano y de mis amigos de Alicante Vivo. Sin más pretensiones que la verdad han hechomás en menos tiempo que muchos con toda su ambición. Estoy con vosotros.
Eusebio Pérez Oca
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