sábado, 16 de julio de 2011

LLEGARON LOS VÁNDALOS AL PUERTO.





Pues, sí, ya están ahí, o no se marcharon nunca. Uno creía que la juventud había cambiado y que ahora se dedicaba a acampar en las plazas para pedir democracia, y que limpiaban lo que ensuciaban y ponían las pintadas en un papel fijado con celo para no manchar las fachadas. Y, sí, hay muchos jóvenes, y no tan jóvenes, que hacen esas cosas y nos demuestran su alto grado de ciudadanía, su cultura y su buena educación. Pero... No todos los jóvenes son así, por desgracia. Hay malas bestias con cerebro de mosquito que se dedican a ir a las zonas de ocio todos los fines de semana a ponerse de alcohol del barato, de porros y pastillas de la risa hasta las cejas y después les entra el frenesí y les da por romper cosas, cosas que han costado años de estudio, trabajo y dinero. Como el RELOJ DE SOL DEL PUERTO DE ALICANTE. Sí, ese que está frente al Restaurante Dársena. El diseño científico es de Juan Vicente Pérez Ortíz, especialista en relojes de sol que ha inventado este modelo, el único en el mundo que da (daba antes de ser destrozado) la hora exacta con un minuto de error y que ha sido instalado en varias universidades, parques y zonas de ocio de toda España. Para cargárselo han tenido que quebrar uno de los brazos de la mole de piedra artificial de 1000 kg. de peso, reforzada por dentro con barras de acero. Como decía un amigo que contemplaba conmigo el destrozo: "La de fuerza y trabajo que habrá tenido que hacer esa mala bestia para romper una cosa tan maciza". Y añadía: "Seguro que si lo tuviera que hacer para ganarse un jornal, habría protestado".





Pues, sí. Afortunadamente hay muchos jóvenes ejemplares que se divierten con los deportes, la informática, la conversación en sana compañía, y que por desgracia están en el paro. Pero como en todas partes hay de todo, y también hay nobles brutos que se dedican a destrozar el patrimonio ciudadano cuando se les intoxican las neuronas.





La prensa les ha llamado VÁNDALOS, pero a mí no me parece bien. Yo propongo que no se mancille así la memoria de aquel pueblo bárbaro que tras una larga peripecia por Hispania acabó creando un reino en la actual Tunez y le dieron el nombre a Andalucía (Al Andalus = Al Vandalus), que ni los tunecinos ni los andaluces tienen la culpa. A los que hacen lo que han hecho al reloj del puerto se les debe llamar directamente MALAS BESTIAS, con perdón de algunas bestias dóciles. Y no otra cosa que muchos piensan, no, que las pobres prostitutas tampoco tienen la culpa.





Dios nos libre de esta pasma.





Miguel Ángel Pérez Oca.

1 comentario:

eusebio pérez oca dijo...

Dos dias antes, una señora de mi edad, es decir, mayor, con un hijo de menos de veinte años, se fotografiaba subida al reloj. Despues lo hizo su hijo. Este no se sentó, se puso en pie. Desde lejos acelere la marcha para afearle la acción. al llegar ya habian marchado. Eran las 12 del medio día. Y es que está claro. Un cacharro que sirve para ver la hora¿? Diria la señora: ¡Si yo tengo un Rxxxx! ¿Pa que sirve esto?. ¡Pa hacerse fotos! ¡¡Borja mari, subete que te afoto!!. Así son las cosas. ¿Que se puede esperar de un hijo con una madre así? Hay quien cuando ve una piedra, ve una piedra, aunque sea con la cara del Dr. Rico o de Gabriel Miró o el niño Flautista o el mreloj de Vicente y Miguel Angel. Me ofendio lo de vandalos como me ofende lo que yo habria dicho.- ¡¡Hijo Putaaaa!!.